Esto está contribuyendo a la reconfiguración de la actividad turística en general. Casi todas las formas y modalidades de turismo pueden analizarse, desde la perspectiva de la demanda, como una EXPERIENCIA CULTURAL. Por otro lado, todos los recursos del patrimonio cultural, tangible e intangible, constituyen activos que pueden transformarse en productos turístico- culturales.
ANDALUCIA tiene hoy una oportunidad para poner en valor bienes diseminados por el territorio: mejorar la consideración social de éstos, renovar un uso social que, en la mayoría de los casos, se había perdido y mejorar su conservación y gestión, incorporando estrategias de fomento del emprendimiento.
Así, por ejemplo, la revisión de la Carta de Turismo Cultural adoptada por ICOMOS en 1999 se explica por los cambios que experimenta este tipo de turismo: ritmo elevado de crecimiento, cambios en el comportamiento del turista, etc.
En la nueva carta la Declaración de ICOMOS se estimula el conocimiento del lugar como estrategia de conservación, fomentando el acceso controlado
y la accesibilidad de los lugares, como mejor medida para la obtención de los recursos necesarios para su preservación. La carta revisada de ICOMOS enfatiza la necesidad de complementar la explotación turística del patrimonio con la preservación del mismo.
Un ejemplo de producto turístico cultural :
RUTA BÉTICA ROMANA
La Ruta está integrada por los Ayuntamientos de Santiponce, Carmona, La Luisiana, Ecija, Almodóvar del Río, Córdoba, Montoro, Almedinilla, Puente Genil, Osuna, Marchena, Jerez, Cádiz, Tarifa y Baena .
Ruta con origen en Málaga pasando por Veléz-Málaga, Nerja, Frigiliana, Almuñecar, Salobreña, Motril, Velez de Benaudalla, Alhama y Granada.